Salir y dar una vuelta beneficia al pequeño desde los primeros días de vida. Sigue estos consejos para un relajante paseo al aire libre.
No hay motivo para no sacar de casa a los recién nacidos desde sus primeras semanas de vida. Además de ser imprescindible para los niños de cualquier edad, salir ofrece a las madres una oportunidad de relajarse y pasar un buen rato fuera de la rutina diaria de casa. Es importante, sin embargo, seguir unas cuantas recomendaciones:
Elige la mejor hora del día
Elige la mejor hora del día para salir a dar un relajante paseo con tu pequeño. Evita las horas más calurosas en verano y las más frías en invierno.
Mejor pasear por espacios verdes
Evita pasear con tu niño por zonas de mucho tráfico. Lo ideal es, siempre que sea posible, caminar por espacios verdes como parques o caminos rurales.
En el canguro o en la carriola
Ya sea con el canguro en contacto con el calor reconfortante de su madre, o cómodamente sentados o tumbados en la carriola, los bebés están rodeados de importantes estímulos para su desarrollo sensorial por lo que salir y ver el mundo exterior es importantísimo para ellos: los colores, los olores, las voces de la gente, los sonidos de la naturaleza... para ellos, pasear al aire libre es una ocasión inmejorable de descubrir el mundo que los rodea o de conocerlo mejor día tras día.