Guía para elegir un chupón para tu recién nacido

Qué tener en cuenta para encontrar el chupón perfecto

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Es bien sabido que la succión no nutritiva es un aspecto fundamental incluso antes del nacimiento: representa una necesidad innata en el bebé y es un entrenamiento esencial que le permitirá, una vez nacido, alimentarse adecuadamente.

Después del nacimiento, cumple una función calmante y de relajación muy importante.

Sin embargo, no todos los chupones son iguales.

Una forma anatómica de la tetina, con una base delgada que se ensancha hacia arriba, es clave para respetar la posición natural de la lengua y la fisiología de la boca del bebé.

Pero cuando se trata de recién nacidos, también el tamaño, el peso y el material son aspectos muy importantes a tener en cuenta al elegir un chupete.

Veamos ahora cómo elegir el más adecuado para los recién nacidos, para respetar la fisiología de la boca y el paladar, y facilitar tanto su aceptación como la succión.

La forma de la tetina del chupón

La forma de la tetina es un elemento fundamental en la elección del chupón, ya que influye tanto en la comodidad del recién nacido como en el correcto desarrollo de la cavidad oral.

Los chupones anatómicos, es decir, con tetinas diseñadas para seguir la curvatura natural del paladar, ofrecen un soporte ideal para el crecimiento bucal.

Los chupones PhysioForma de Chicco tienen una forma anatómico-funcional, diseñada para promover el desarrollo del paladar, estimular de forma equilibrada la musculatura orofacial y todas las funciones vitales de la boca, manteniendo la posición fisiológica de la lengua, alta en el paladar.

Las medidas y el peso influyen en la elección correcta del chupón para recién nacidos.

La elección del chupón debe ser adecuada a la edad del recién nacido.

Una vez elegida una forma fisiológica, las dimensiones reducidas del rostro y la boca son dos aspectos que deben considerarse cuidadosamente.

De hecho, un modelo demasiado grande en tamaño puede resultar difícil de agarrar y mantener en la boca para el bebé, además de ser demasiado voluminoso en la cara.

Ofrecer al recién nacido un chupón cuyas dimensiones de la tetina y el escudo no estén correctamente adaptadas a su boca y paladar puede ser poco fisiológico para su desarrollo y también incómodo para el bebé.

En los bebés más pequeños, donde la succión aún es débil, el peso del chupón juega un papel fundamental: el modelo más ligero es, sin duda, el más adecuado en los primeros meses de vida, ya que es más fácil de mantener en la boca.

Puede ocurrir que, si ofrecemos al bebé un modelo demasiado pesado para su edad, le cueste succionar e incluso se le caiga con facilidad, lo que la madre podría interpretar erróneamente como un rechazo del chupón.

Para los recién nacidos más pequeños, lo ideal es elegir un chupón con una tetina pequeña y un escudo ligero, como los PhysioForma Micro y PhysioForma Mini Soft.


A partir de los 6 meses, la tetina del chupón debe ser más grande para adaptarse al crecimiento de la boca, manteniendo siempre el confort y la seguridad.

Para los niños mayores de 18 meses, existen modelos diseñados para bocas más grandes, en caso de que el chupón se siga utilizando.

Material y seguridad del chupón para recién nacidos

El material es fundamental para el confort y la seguridad del recién nacido.

La silicona es un material práctico, higiénico e indeformable; por ello, los chupetes de silicona resultan resistentes y fáciles de limpiar, además de ser suaves y delicados con la piel sensible del bebé.

También se sabe que, al nacer, uno de los sentidos más desarrollados es el tacto: elegir un chupón completamente suave respeta la delicadeza natural de la piel del bebé.

Los chupones Chicco, por ejemplo, cuentan con un acabado Soft Sense, que ofrece una sensación aterciopelada y natural.

Su diseño ergonómico, pensado para minimizar los puntos de contacto con la piel, proporciona una suavidad extrema en el rostro y favorece el movimiento natural de la boca.

Los chupones Chicco Dual Soft y Mini Soft, diseñados específicamente para recién nacidos de 0 a 2 meses, son completamente blandos para una máxima suavidad en el rostro.

La unión suave y redondeada se adapta perfectamente a la cara del bebé, ofreciendo una sensación similar al pecho materno.

Chupón para bebé recién nacido

El momento ideal para introducir el chupón a un recién nacido puede variar según diferentes consideraciones individuales y familiares.

En general, los expertos recomiendan esperar hasta que la lactancia materna esté bien establecida, para evitar cualquier interferencia con el agarre al pecho.

No existe un plazo exacto, ya que este período puede variar de una díada (madre-bebé) a otra, y puede ir desde unos pocos días hasta algunas semanas.

Sin embargo, si el bebé es alimentado con fórmula, o si la lactancia materna se desarrolla sin dificultades, el chupón puede introducirse desde el principio.

Dado que al nacer y durante las primeras etapas es fundamental fomentar al máximo el contacto entre la madre y el bebé, en los momentos de relajación o al dormir, la madre puede ofrecer un chupón con una cavidad en la parte exterior, como los chupones PhysioForma Mini Soft de Chicco.

Este espacio está diseñado específicamente para que la madre pueda introducir su dedo, favoreciendo así el contacto físico con el bebé, sin alterar la forma fisiológica de la tetina, que cuenta con una base delgada que se curva hacia arriba para dejar el espacio adecuado a la posición natural de la lengua.